Para no ir más lejos, se sabe que con el uso de un calzado de 6 cm de altura, por ejemplo, el peso del cuerpo se distribuye en el pie en un 75 por ciento en la parte delantera y un 25 en la parte trasera; y cuando es de 10 cm o más casi la totalidad del peso recae en la zona frontal.
Pero como es imposible pedir que no usen este tipo de calzado, Ortomec le cuenta algunas formas de contrarrestar los daños de los tacones. Además de las plantillas personalizadas, existen otros trucos. Conózcalos.
Pero como es imposible pedir que no usen este tipo de calzado, Ortomec le cuenta algunas formas de contrarrestar los daños de los tacones. Además de las plantillas personalizadas, existen otros trucos. Conózcalos.
No se los quite
- En caso de que no esté acostumbrada a llevar tacones, evite ponerse unos nuevos y altísimos. Es mejor optar por algo más confortable; por ejemplo, un calzado de unos 5 o 6 centímetros.
- Quedarse quieta no es una solución. Todo lo contrario. Es mejor caminar de vez en cuando, haciendo pequeños descansos y evitando las altas presiones plantares.
- Aunque es mejor no llevar tacones tan altos, hay ocasiones en que no hay otra alternativa. Si es el caso, se recomienda ensayar en casa mínimo una semana antes de usarlos. La idea es que el pie se adapte a la nueva forma de caminar.
- Si algunos tacones son ligeramente incómodos, lo son aún más aquellos que no tienen la talla indicada. No olvide que de esta manera evitará que el empeine haga fuerza para sujetarlos.
- Una vez a la semana haga lo siguiente: sumerja sus pies en agua caliente con zumo de cítricos (limón, naranja, etc.); límpielos con una piedra pómez; y luego aplíqueles una loción.
- Utilice las plantillas para pies de Ortomec. Recuerde que estas, además de reducir las molestias y prevenir la aparición de lesiones, permiten lograr una mayor superficie de apoyo y ofrecen, según sea la altura, una distribución más homogénea de las presiones.
No hay comentarios:
Publicar un comentario